Charybdis (Charybdis) hellerii - ESPECIES MARINAS Y COSTERAS INTRODUCIDAS DE COLOMBIA
ESPECIES MARINAS INTRODUCIDAS CONOCIDAS EN COLOMBIA
Charybdis (Charybdis) hellerii es una jaiba (cangrejo nadador) pequeña, nativa del IndoPacífico, donde está presente desde el Mar Rojo y África Oriental hasta el norte de Australia y Nueva Caledonia, incluyendo China y Japón hacia el norte. Ha sido introducida al Mediterráneo y el Atlántico occidental. En América está presente actualmente desde Carolina del Norte en Estados Unidos hasta Florianópolis en Brasil, donde ocupa variedad de hábitats costeros como arrecifes de coral y rocosos, lechos de cascajo y macroalgas, y manglares. Se desconocen sus impactos sobre la biota nativa.
Reino: Animalia Phylum: Arthropoda Subphylum: Crustacea Clase: Malacostraca Orden: Decapoda Familia: Portunidae Género: Charybdis Especie: Charybdis helleri
Taxonomía | ||
Nombre común: | Cangrejo nadador del Indo-Pacífico, Cangrejo manos espinosas | |
Nombre científico: | Charybdis (Charybdis) hellerii (A. Milne-Edwards, 1867) | |
Sinonimias registradas:: | Goniosoma hellerii A. Milne Edwards, 1867 Charybdis merguiensis (De man, 1887) Charybdis vannamei Ward, 1941 Goniosoma merguiense De Man, 1887 | |
Especies similares: | Charybdis variegata, Cronius ruber | |
Identificación | ||
Diagnosis: | Charybdis (Charybdis) hellerii se reconoce por la presencia de una espina en el margen posterior del carpo de la quinta pata, a lo que debe su nombre común "cangrejo de manos espinosas". Superficie dorsal del caparazón desnuda, margen anterolateral con 6 dientes prominentes de puntas negras. Región frontal del caparazón con 6 dientes prominentes: 2 orbitales interiores y 4 submediales romos. Quelas fuertes con 5 espinas de punta negra en el margen posterior distal. Propodio con una fila de espinas en el margen posterior. El abdomen es triangular redondeado en ambos sexos, pero el doble de ancho en la hembra que en el macho (Lemaitre, 1995; Medellín et al., 2011; Fofonoff et al., 2018). | |
Dimensiones: | Longitud caparazón 41-50 mm; ancho de caparazón 66-81 mm (Medellín et al., 2011). Para ejemplares de Estados Unidos se han reportado tamaños de 47-62 mm ancho de caparazón en hembras, y de 74-83 mm ancho de caparazón en machos (Perry, 2023). | |
Coloración: | Coloración general verde oscuro, con tinte púrpura en la cara interna de las quelas y en el dorso de las patas (Lemaitre, 1995). Caparazón con áreas verde pálido o blanquecino en región frontal, hepática y epibranquial. Dedos de los quelípedos púrpura oscuro (Perry, 2023). | |
Material colectado: | ||
Ecología | ||
Hábitos alimentarios: | Generalmente carnívoro, puede consumir moluscos, crustáceos, anélidos, entre otros invertebrados (Dineen et al., 2001; Perry, 2023). | |
Reproducción y ciclo de vida: | Es una especie gonocórica, con reproducción sexual, ovípara. La madurez sexual se alcanza con tallas entre 35-40 mm ancho de caparazón, aproximadamente. Las hembras tienden a ser más pequeñas que los machos. La fertilización es interna, y los huevos son incubados por la hembra en una masa ovígera que lleva entre el abdomen y el caparazón. La eclosión libera larvas zoeas planctónicas pequeñas (1 mm), que presentan seis mudas hasta convertirse en megalopas nadadoras. Después de unos 44 días en el plancton la larva adquiere las características del adulto y se asienta en el fondo. Charybdis hellerii tiene una alta fecundidad (22.517 a 292.050 huevos por hembra; Siddiqui y Ahmed, 1992) y un desarrollo rápido, lo que aumenta su potencial de invasión (Dineen et al., 2001; Fofonoff et al. 2018). | |
Hábitat: | Las jaibas suelen preferir los fondos blandos, pero C. helleri usa una variedad de hábitats intermareales y submareales, incluyendo fondos rocosos, escolleras, arrecifes de coral, cascajo, raices de mangle, pastos marinos, y lechos de algas, hasta unos 51 m de profundidad (Stephenson et al., 1957; Campos y Turkay, 1989; Fofonoff et al. 2018). | |
Distribución global: | Su rango nativo incluye Japón, Filipinas, Nueva Caledonia, Australia, Hawái, el Océano Índico y el Mar Rojo (Stephenson, 1972; Kathirvel y Gopalakrishnan 1974; Vannini 1976). Como especie introducida en el Mar Mediterráneo (Israel), Mar Egeo (Grecia, Turquía), Atlántico occidental desde Carolina del Norte (Cabo Hateras) hasta Florianópolis en Brasil, con registros en Cuba (Gómez y Martínez-Iglesias, 1990), Venezuela (Moran y Atecio, 2006); Colombia (Campos y Turkay, 1989), y Brasil (Mantelatto y García, 2001). | |
Distribución local: | El primer registro en Colombia fue en 1987 en Bahía Portete (La Guajira), y un año después se encontró en la Bahía de Chengue en el Parque Tayrona (Campos y Turkay, 1989). También ha sido registrada en la Ciénaga Grande de Santa Marta (Campos et al., 2004). | |
Introducción y expansión geográfica: | La especie es nativa del IndoPacífico, y se cree que pasó al Mediterráneo hace un siglo a través del Canal de Suez, donde se dispersó alcanzando Chipre y el Mar Egeo (Galil, 2007). El primer registro de la especie en América fue en 1986 en Carolina del Sur, donde pudo haber arrivado en aguas de lastre de buques comerciales; en los años siguientes se reportó en Florida, Cuba, Venezuela y Colombia, en 1995 se colectó un ejemplar al sur de Brasil. Su distribución actual en América es amplia, abarcando desde Carolina del Norte, Estados Unidos, hasta Florianópolis en Brasil (Campos y Turkay, 1989; Dineen et al, 2001). | |
Impactos: | El cangrejo nadador de manos espinosas es un potencial competidor de cangrejos nativos, y podría llegar a desplazarlos causando cambios en las comunidades bentónicas (Felder et al., 2010). No se han estudiado sus efectos en Colombia. | |
Medidas de manejo: | No se conocen medidas de manejo específicas para la especie. En Colombia esta jaiba está incluida en la lista oficial de especies exóticas invasoras (Resolución Minambiente 0067 de 2023), pero estudios sobre su distribución, abundancia y efectos se requieren para definir la pertinencia de desarrollar e implementar medidas de manejo. | |
Referencias y otros recursos | ||
Personas de contacto: | Luis Chasqui - Investigador Invemar (luis.chasqui@invemar.org.co) | |
Enlaces web: | https://www.marinespecies.org/aphia.php?p=taxdetails&id=107382 https://nas.er.usgs.gov/queries/FactSheet.aspx?SpeciesID=191 https://invasions.si.edu/nemesis/species_summary/-79 | |
Referencias principales: | •Campos, N.H. and M. Türkay. 1989. On a record of Charybdis hellerii from the Caribbean coast of Colombia. Senckenbergiana marit., 20: 119-123. | |
Cítese como: | Chasqui, L. 2023. Charybdis (Charybdis) hellerii. En: Especies Marinas y Costeras Introducidas en Colombia. http://invasoresmarinos.invemar.org.co | |
Fecha de actualización: | ||
21/06/2023 |
Algunas invasiones biológicas marinas son el resultado de mecanismos de dispersión natural, sin embargo las mayores y más importantes contribuciones a la llegada de especies exóticas se asocian con actividades humanas.
Algunos organismos pueden arribar inadvertidamente en el ejercicio cotidiano de actividades como el transporte marítimo y el turismo, pero también en muchos casos las especies exóticas son introducidas intencionalmente, tal es el caso de las especies importadas con fines comerciales como algunos peces e invertebrados de interés en la industria acuícola y con uso ornamental.
El nivel actual de comercio global amenaza con desaparecer las barreras ecológicas entre los ecosistemas marinos del mundo mediante la introducción de especies exóticas, pues las dos principales vías de introducción de especies exóticas marinas son la descarga de organismos presentes en las aguas de lastre de los buques comerciales y la llegada de organismos adheridos a los cascos de los barcos (biofouling).
Especies como el Vibrio cholerae que causó la muerte a más de diez mil personas en Sur América y el Golfo de México, y algunas especies de algas tóxicas como Alexandrium minutum y Gymnodinium catenatum, que han causado daños a los ecosistemas marinos agotando el oxígeno y liberando toxinas, han arribado en aguas de lastre.
En algunos casos las prácticas inadecuadas de manejo y control de especies acuáticas introducidas con fines de cultivo, pueden llevar al establecimiento de poblaciones indeseadas en ambientes naturales, tal es el caso de la tilapia del Nilo presente en humedales de los ríos Magdalena, Cauca, San Jorge y Sinú.
Quizá el caso más reciente, alarmante y bien documentado en ecosistemas marinos del continente americano sea el del pez león, un agresivo depredador establecido actualmente en buena parte del Atlántico occidental que llegó a Norteamérica como un pez ornamental común en acuarios marinos.
Normativa en Colombia
Ley 165 de 1994: Adopta el Convenio de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica, donde el literal h del artículo 8 dice "Impedirá que se introduzcan, controlará o erradicará las especies exóticas que amenacen a ecosistemas, hábitats o especies"
Resolución MAVDT 0848 de 2008: Por la cual se declaran unas especies exóticas como invasoras y se señalan las especies introducidas irregularmente al país que pueden ser objeto de cría en ciclo cerrado y se adoptan otras determinaciones.
Resolución MAVDT 207 de 2010: Por la cual se adiciona el listado de especies exóticas invasoras declaradas por el artículo primero de la Resolución 848 de 2008 y se toman otras determinaciones.
Resolución UAESPNN 0132 del 4 de agosto de 2010: Protocolo de extracción y control de la especie exótica invasora pez león (Pterois volitans) presente en las áreas del Sistema de Parques Nacionales Naturales.
Resolución MADS 0675 del 20 de junio de 2013: Por la cual se modifican parcialmente las resoluciones 0207 del 3 de febrero y 0132 del 4 de agosto de 2010 y se establecen otras disposiciones. Artículo 1. - Adopción.- Adóptase el "Plan para el Manejo y Control del Pez León Pterois volitans en el Caribe Colombiano" y el "Protocolo para la Captura, Extracción y Disposición Final de los Especímenes de Pez León (Pterois volitans)".
Resolución MADS 1204 del 25 de julio de 2014: Por la cual se conforma el Comité Técnico Nacional de Especies Introducidas y/o Trasplantadas Invasoras en el territorio nacional y se reglamenta su funcionamiento.